Pantone lovers

¿Puede alguien tener fijación por algo tan estúpido (sic) como un sistema de identificación cromática? Puede haber gente así y lo confesamos, formamos parte de ese grupo. Dedicarte a ciertos oficios relacionados con aspectos del diseño, que te guste el tema y que te encapriches de cualquier cosa de color brillante, mate, perfecto, con el tono perfecto, hace que cuando veas algún producto con la firma de Pantone te vuelvas un poco tonta. Hasta la Fnac ha sucumbido a esta corriente y venden en sus tiendas libretas, agendas y demás material escolar/de oficina de la famosa gama cromática. Pero más allá de las clásicas sillas, las cajas e incluso los imanes de la nevera, hemos descubierto en estos últimos días algunas curiosidades (frikis, sí) que nos han hecho sonreír. 

Estas tartitas creadas por la bloggera Emilie de Griottes para una revista culinaria francesa con frutitas del bosque, plátano, tomates y otros dulces deliciosos nos parecen el colmo de lo mono. Esto sí que es creativo y no los dos mil quinientos tipos de magdalenas / cupcakes que inundan los blogs de cocina de un tiempo a esta parte.  

¿Se puede tener mejor pinta? 

Sin abandonar del todo el mundo de la comida y muy a propósito de las vacaciones que están a punto de acabar (para quien sea universitario o estudiante) hemos visto estos huevos de pascua decorados con la famosa escala Pantone hechos por otra bloggera y diseñadora, Jessica Jones desde su página How About Orange. Una monada. 

Si conocéis un poco de la actualidad de esta marca, ya sabréis que cada año el Pantone Color Institute elige el que será según ellos el color del año. Anunciaron en diciembre que el color de 2012 sería el Tangerine Tango (tiene una sonoridad bonita, ¿verdad?), un naranja rojizo lleno de energía, que es lo que nos falta para salir de la crisis en la que estamos sumergidos. Sephora se subió al carro y creó junto con Pantone una edición limitada de productos inundados del Tangerine Tango. He aquí algunos de los más curiosos. 

Nos encantan los pintauñas, las brochas nos parecen preciosas (hay que decir que casi cualquier set de brochas de pelo natural nos sacan la lágrima) y el rizador de pestañas sustituiría al instante al metálico típico básico que tenemos todas en nuestro neceser. Eso es así. Viva Pantone y sus hijos. 

Imágenes: vía Griottes.fr, Howaboutorange.blogspot.com, Sephora.com.